"¡Levántense, compañeros del clan, y recuperen nuestro honor pisoteado! ¡La sangre de los ancestros corre por nuestras venas! Somos la tormenta: rompemos la tierra, blandimos el torbellino. ¡Las llamas de los dioses siguen ardiendo! ¡Ellos nos acompañan!".
-Ealda

"La furia de la tormenta me pertenece, hermano. Yo llamo, y los cielos rugen en respuesta".
- Vasily, para Bul-Kathos

"La revelación de que la maestra sastre Callas era en realidad una bruja solo sirvió para alimentar aún más el deseo de sus vendas con encantamientos únicos".
- Libro de Implementos de Barrett

"Que la Luz del Padre Inarius brille sobre todos los viajeros exhaustos de esta tierra santa. Miren hacia su resplandor y observen cómo se renueva su energía".
-Inscripción en estatua

"Los jóvenes aprendices creen que es una tontería usar una placa pesada en los pantanos. No entienden que nuestra armadura es nuestro legado, sin nuestro legado no somos nada".
- Guerrero Divino Pembroke

Una curiosidad de origen natural, la luna de sangre sigue siendo un símbolo de desgracia para los fieles de Zakarum más supersticiosos. Los niños nacidos bajo esta luna suelen considerarse malditos y son exiliados para que no se propague.

"El dominio de la magia de sangre del infame Nigromante Gaza-Thul era indiscutible. Muchos sospechan que, al morir, su piel se usó para confeccionar esta armadura espeluznante".
-Libro de Implementos de Barrett

"Y entonces, cuando el sol se ocultaba detrás de las colinas cada noche, él sabía que Jack el Cinéreo pronto estaría cerca. Observando y esperando".
- Historias de Greenslade, capítulo 2: "Cada Noche Larga"

El demente artesano vio que los dedos se le ponían negros por la quemazón del frío mientras trabajaba en la tela, pero no quiso dejar a un lado la aguja y el hilo ni por un momento.

"No confundas tu manipulación del rayo con control. La llama azul es su propia maestra y no necesita mano alguna que la blanda. No eres más que un mero conducto para su caos". —Atribuido al mago Woh

Vestimenta resplandeciente manchada con el poder de la corrupción que impregna las mismísimas fibras de la tela y los hilos. Sirven como una parte integral de la vestimenta ceremonial de los Primus.

Al usar estos pantalones empapados de vísceras, un solo deseo abrumador te invade la mente: cazar.

Al usar estos pantalones empapados de vísceras, un solo deseo abrumador te invade la mente: cazar.